¡PASARLO BIEN!

Fuerza en roca

Tras una larga temporada de entrenamiento en plafón, el cuerpo pide un descanso y la cabeza un cambio de escenario. Llegó la hora de escalar en roca.

| No hay comentarios |

Ya lo decía Patrick Edlinger, verdadero mito de la escalada de los años ochenta: «la escalada es el mejor entrenamiento para la escalada». Y es que cuando se habla de entrenamiento, no siempre se es consciente de que la escalada que realizamos el fin de semana es una de las mejores formas de entrenar.

Realizar ejercicios de campus, pesas o simplemente hacer búlder en el plafón, es la manera más rápida y eficaz de estimular el proceso de supercompensación relacionado con la fuerza. Sin embargo, a medida que aumenta el nivel de fuerza, disminuye el nivel técnico, de ahí la necesidad de «aprender» a combinar las cualidades físicas con la técnica para obtener resultados satisfactorios. De hecho, no es extraño ver a escaladores con un nivel impresionante en panel totalmente perdidos una vez colgados de una piedra, simplemente no «saben» como utilizar esa fuerza, es como calzar un Ferrari con las ruedas de un 600.
El entrenamiento en roca es el más específico y agradable de todos los tipos de tortura conocidos para progresar en escalada, simplemente porque cuando «entrenamos» en roca, lo que realmente hacemos es escalar, es decir lo que más nos gusta. Aquí no existen conceptos como series, cronómetro o repeticiones, simplemente se trata de escalar con el fin de enriquecer ese repertorio gestual que convierte el fuerte escalador en buen escalador, dos conceptos muy distintos.

En búlder más aún que en deportiva, la precisión en la ejecución de los movimientos es crucial, sobre todo en tipos de escalada que precisan rapidez de movimiento como la escalada sobre planos o pinzas romas por ejemplo. Si además combinamos este tipo de agarres con unas pobres presas de pie, entendemos la necesidad de una buena técnica de pies.
Para mejorar la técnica de pies no hay secreto, elige bloques tumbados con pasos de equilibrio y si fallas, intenta encontrar qué es lo que no funciona. Estos puzzles mentales te obligan a analizar la situación y a encontrar soluciones técnicas.
Si lo tuyo son lo bloqueos estáticos (fuerza) y eres incapaz de realizar movimientos dinámicos (potencia), prueba a escalar con ligeros movimientos dinámicos, aunque los puedas realizar totalmente en estático. Esto no sólo te ayudará a aumentar tu potencia, sino que además mejorará tu capacidad de decisión, algo muy útil cuando te ves atrapado en un potente paso de bloque.

La clave está en comprender el porqué de nuestros fallos, analizarlos y solucionarlos aportando, en cada pegue, un cambio en la ejecución del movimiento. A todo esto se le llama trabajo de la técnica, una de las cualidades más importantes pero a la vez más ignoradas por la mayoría de nosotros.

En definitiva, al igual que en deportiva, se trata de mejorar tus puntos débiles, trabajando lo que más nos cuesta y meternos en la cabeza que el entrenamiento en roca es el complemento ideal de las largas sesiones de plafón.

Y terminamos con un ejemplo: cuando le preguntaron a Fred Nicole de qué manera entrenaba y cual era el mejor entrenamiento para hacer 8b+ de bloque respondió: «¿entrenar?, yo lo que hago es escalar, si haces lo que te gusta, no deberías encontrar problemas para progresar».

Lecturas relacionadas

Ayudarnos a difundir la cultura de la montaña

En Desnivel.com te ofrecemos gratuitamente la mejor información del mundo de la montaña. Puedes ayudarnos a difundir la cultura de la montaña comprando tus libros y guías en Libreriadesnivel.com y en nuestra Librería en el centro de Madrid, o bien suscribiéndote a nuestras revistas.

¡Suscríbete gratis al boletín Desnivel al día!

Estamos más ocupados que nunca y hay demasiada información, lo sabemos. Déjanos ayudarte. Te enviaremos todas las mañanas un e-mail con las historias y artículos más interesantes de montaña, escalada y cultura montañera.