En muchísimos años no se había visto una manifestación así en la capital maña, pues para recordar algo similar habría que remontarse a las que tuvieron lugar contra el trasvase del Ebro. Desde la plaza de la Glorieta Sasera a la Plaza del Pilar fue desfilando una gran riada de gente, a pesar de que dos días antes las instituciones promotoras de unir las estaciones de esquí de Astún y Formigal intentaron desmovilizar con mensajes confusos, en los que daban a entender que Canal Roya ya estaba salvada de sus agresivos proyectos frente al medio natural, ya que iban a renunciar a la asignación de los fondos económicos que vienen de Europa.
Los grandes protagonistas de esta manifestación festiva fueron los muchos participantes que recorrieron pacíficamente las calles, muestra de un alto compromiso ciudadano y nivel cívico. Una vez en la plaza del Pilar de Zaragoza, también hubo mensajes que transmitieron personajes conocidos como el montañero Sebastián Álvaro (exdirector del programa televisivo Al filo de lo imposible), Juan Aguirre y Eva Amaral (del grupo de música Amaral) que vinieron expresamente desde Galicia en un momento de mucho trabajo,
Isabel Santolaria –montañesa y empresaria de turismo en el Pirineo- o Luis de Infanta, quien expuso el problema parejo de la conservación del valle de Castanesa, donde se va a construir una gran carretera de acceso nuevo a la estación de esquí de Cerler con fondos igualmente “Next Generation” concedidos por Europa para la recuperación de las economías tras la crisis del COVID.
Hay que recordar que ya el año pasado las pistas de esta zona de la comarca altoaragonesa de la Ribagorza estuvieron abiertas tan sólo veinte días por falta de nieve. Tres semanas es el “negocio” por el que se destroza un valle intacto con dinero público.
Los dos componentes del grupo musical Amaral dieron un discurso emotivo explicando que las montañas han sido siempre lugares sagrados para tribus, culturas, religiones… y pedían mantener ese cuidado, ese respeto, que también le debemos a las montañas del mundo y de Aragón:
“Los aragoneses tenemos otro gran referente en lo que es la parte central del Pirineo: concretamente en el Monte Perdido, en el Aneto y, por supuesto, en el macizo del Anayet, un viejo volcán apagado donde aún habitan la perdiz de las nieves, el quebrantahuesos, así como grandes manadas de sarrios que corretean libremente por sus pendientes de hierba o nieve”.
Mientras que Sebastián Álvaro habló que no hay nada imposible si se pone empeño, y entre otras ideas dijo (el texto integro lo tienes aquí):
“Es por nuestros nietos, por mis nietos, Luca y Gael, que andan por ahí mezclados con todos vosotros. Quiero que ellos puedan sentir también esa sensación de descubrimiento, de asombro y prodigio. Que tengan la posibilidad, si quieren, de aventurarse en lo desconocido y sentirse también Conquistadores de lo Inútil. Pero a veces lo inútil, como nos recuerda el reciente premio Princesa de Asturias, Nuccio Ordine, es, precisamente, lo que no tiene precio, pues como dijo Machado: solo el necio confunde valor y precio. Además, es una obligación moral; nuestro comportamiento ético nos dice que un día tendremos que responder a la pregunta: ¿Qué hicisteis vosotros por preservar el Patrimonio Natural de todos…? Nosotros estuvimos aquí, de pie, cuando se nos requirió”.
Al término de la manifestación hubo conciertos, música de cantantes y otros grupos de artistas que incluso han realizado canciones propias de apoyo expreso a la protección de la Canal Roya, entre ellos María José Hernández o el nuevo rap que se ha compuesto para denunciar toda esta aberración ambiental que Aramón, Ibercaja, Diputación de Huesca y Gobierno de Aragón impulsan frente a la opinión y la repulsa de gran parte del territorio:
La movilización popular ha hecho que la Canal Roya esté salvada, pero sólo por el momento, aunque no definitivamente pues muchos políticos y partidos siguen diciendo que se trata de un proyecto irrenunciable, como si realmente fuera algo estratégico para Aragón, que no lo es.
Tampoco la Diputación de Huesca ni el Gobierno de Aragón han pedido disculpas, ni se retractan ni renuncian a continuar con esta unión de estaciones de esquí en el futuro con otros dineros, siempre públicos, de todos.
Por eso el lema principal de la masiva manifestación del pasado día 6 era la exigencia de declarar ese Parque Natural Anayet-Partacua que ya se inició hace 10 años, pero que ha sido deliberadamente aparcado por el propio Gobierno de Aragón que lo inició. Pues eso sí que sería un proyecto estratégico de verdadero turismo sostenible para la zona, y que habría que apoyar institucional y públicamente.
Por último, hay que decir que lo que sí parece claro definitivamente es que los 34 millones de dinero público -la mayoría venidos de Europa, unos 27- ya no se utilizarán con la finalidad de unir las estaciones de esquí sobre los terrenos del valle salvaje de la Canal Roya, entre Canfranc y Sallent de Gállego. Y es que resulta prácticamente imposible que ninguna empresa privada invierta dinero en una estación de esquí, un negocio ruinoso si éste no va unido a recalificación de terreno y la construcción o venta de viviendas como acaba de anunciar Astún, que aspira a construir 800 nuevos apartamentos en esta zona de los Pirineos.
En definitiva: que los que pretendían unir las estaciones destrozando el valle de Canal Roya han dado marcha atrás gracias a la presión ciudadana, pero que la Canal Roya y el Anayet no estarán realmente salvados hasta que toda esta belleza no quede protegida con la figura de un anhelado Parque Natural.
Por eso, aunque la manifestación fue un éxito, la Plataforma en Defensa de las Montañas de Aragón y todas las voces de organizaciones y personajes emblemáticos que hasta ahora se han alzado para condenar este proyecto siguen luchando, sin bajar la guardia. Hasta que el Parque Natural sea una realidad.
