Eduardo Martínez de Pisón es una figura a la que todos admiramos. Por su conocimiento y esa capacidad única, casi mágica, que tiene de transmitirlo. Y, sobre todo, por su humanidad. Eduardo es un sabio en el más amplio sentido de la palabra.
Lo más importante no es lo que sabe sino esa forma que tiene de contarlo, absolutamente increíble, propia de cuando el conocimiento no residía en las máquinas sino en las personas, en los seres humanos.
Por eso Eduardo se indigna ante el destrozo que se quiere hacer con la Canal Roya. Un destrozo que nada tiene que ver con la lógica, el conocimiento, la humanidad, ni tan siquiera, como seguramente tratan de justificar los promotores, con estrictos criterios empresariales, porque lo que se quiere hacer, si no es porque se pretende contar con dinero público jamás sería viable económicamente.
Lo que se busca en la Canal Roya es una barbaridad que debemos impedir porque, como dice Eduardo Martínez de Pisón en este vídeo (filmado por Ana del Valle), es el inicio de próximas destrucciones de parajes naturales tanto del Pirineo como de otras montañas y paisajes dentro de una visión absolutamente cortoplacista e ilógica.
Lo mejor es que dejemos explicar a Eduardo Martínez de Pisón lo que representa este plan de destruir la Canal Roya.
«Son valores y bienes universales que no se pueden malograr por una política cicatera y de pocas miras. Estoy absolutamente convencido de que la mayor parte de la gente que haya pisado la Canal Roya se quedará espantada de que allí se puede organizar lo que está previsto. Creo que los organizadores de estos circos, de esa gente que se quiere cargar la Canal Roya, no la ha visto, porque quien quiera cargarse la Catedral de Burgos desde una oficina no la ha visto. La Canal Roya como esos otros lugares que son espectáculos paisajísticos del Pirineo, es a su modo, a su manera, una especie de Catedral de Burgos. Hay cosas que no se pueden hacer, que tienen un límite, hay una frontera roja la cual no se puede pasar. La destrucción de Canal Roya me parece absolutamente inaceptable. La Canal Roya es una torre de un castillo, el castillo de todo el Pirineo, si cae esa torre cae todo el castillo porque se pueden hacer las mismas barbaridades en cualquier otro lado».
Eduardo, un sabio al que todos respetamos por los valores que transmite, termina sus palabras de una manera absolutamente lógica y muy dura, que invitan a la reflexión:
«Señores, ustedes pueden hacer lo quieren porque tiene el poder, pero yo estaré absolutamente en contra y les miraré con desprecio».
Soy Abilio Lastra, soy y resido en Cantabria, en Cantabria tenemos una estación de esquí, Brañavieja en Campoo cerca de Reinosa. Que os voy a contar de las estaciones de esquí yo no las piso ni arto de grifa. Gracias.
La solución sería hacer una góndola que uniese las estaciones de Astún Y Formigal, de tal manera que la Canal Roya seguiría virgen y las estaciones estarían conectadas.