Cuando Jimmy Webb realizó la primera ascensión de Sleepwalker hace ahora cinco años, la acompañó de su primera propuesta de 8C+ y del apelativo “el bloque más duro del país”. Entonces poco podía imaginar que se iba a convertir en una referencia en el grado y que iba a figurar entre las líneas más repetidas en el 8C+, junto con Creature from the black lagoon y Off the wagon low, de sus amigos Daniel Woods y Shawn Raboutou respectivamente.
Tampoco querría imaginar que la línea llegaría a ser sujeto de debate para una eventual decoración a 8C, como sugirió Zander Waller tras su repetición del pasado mes de octubre. Desde entonces, ha habido al menos otras cuatro repeticiones (Kai Whaley, Zach Galla, Peter Satt, Noah Wheeler) y la cuestión del grado se ha continuado debatiendo…
Kai Whaley, del 8B al 8C+ con 17 años
La primera de ellas correspondió al joven Kai Whaley, de 17 años de edad, a finales de noviembre. De niño en Las Vegas se había sentido especialmente inspirado por Jimmy Webb, a quien había podido ver en directo durante el proceso de intentar Sleepwalker. Comentaba en sus redes sociales que la línea “tiene un gran espacio en mi corazón porque crecí en Las Vegas y vi a Jimmy durante el proceso de la primera ascensión; estoy muy emocionado de finalmente ser lo suficientemente fuerte para anotármela”.
Su encadenamiento fue, a todas luces, muy especial. Y es que hasta entonces la página de bloques resueltos más dura de la libreta de Kai Whaley correspondía al 8B de Slasher y Masterpiece que acababa de realizar en Joe’s Valley durante las semanas precedentes. Ahora mismo, todavía no ha estrenado las páginas dedicadas al 8B+ ni al 8C.
Noah Wheeler y el tema del grado
La última repetición conocida ha sido para Noah Wheeler, bloquero estadounidense de 21 años de edad. Según cuenta en sus redes sociales, llevaba un año soñando en hacerse con la línea, después de haber invertido dos sesiones en ella el año pasado. Entonces pudo hacer todos los movimientos de forma aislada, pero tenía pendiente enlazarlos en el encadenamiento.
No dejó pasar el tiempo y aprovechó los primeros días del año para someter el bloque a asedio y terminar llevándose la repetición. Su motivación por las nubes consiguió superar la barrera que supuso el hecho de caerse cinco veces seguidas en la pinza final. “Afortunadamente, después de un día de descanso y reconciliación mental, conseguí quedarme en el lance desde el principio y llevarlo hasta el top”, apostilla.
Noah Wheeler argumenta también la cuestión del grado, que él sitúa en el escalón del 8C+, y apunta en la dirección de la altura del escalador:
En referencia al grado, hay tres métodos principales para el bloque, dependiendo de tu altura, y con cada uno de ellos cambia la dificultad. Como yo tuve que encadenar con el método original, que me pareció bastante más duro y fuerte que los 8C’s que había hecho e intentado, creo que un 8C+ suave es razonable, aunque eso puede cambiar con el tiempo. De todos modos, estoy emocionado por continuar aprendiendo del proceso, tanto física como mentalmente.
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